Título original: The Hobbit: The Desolation of Smaug.
Título en español: EL Hobbit: La desolación de Smaug.
Año: 2013.
Director: Peter Jackson.
Actores principales: Ian McKellen,
Martin Freeman,
Richard Armitage.
Formato: Screeming mortal doblado al castellano.
Después de la
mamarrachada
perpetrada por Peter Jackson hace un año me esperaba una auténtica basura
infumable de esta segunda entrega de la trilogía que se ha sacado de la manga
el director, pero tengo que decir que es mucho peor de lo que me esperaba.
Simplemente no hay por donde cogerla, diría que es una de las peores películas
que he visto jamás. En resumen se podría decir que no entiendo como le puede
gustar a nadie que se acerque a esta película con un mínimo de objetividad. Por
supuesto cinematográficamente es una basura con todas las letras, en la que el
director demuestra una vez más su inutilidad para usar recursos
cinematográficos mínimamente maduros y su absoluta falta de gusto en todos los
sentidos. Pero bueno, esto era lo esperado. Desde el punto de vista de un
aficionado a las películas de acción y entretenimiento la película es aburrida,
las escenas de acción no son nada del otro mundo y por momentos resultan
realmente bochornosas (hasta los fanboys más recalcitrantes se han tirado de
los pelos con el acuapark de los barriles), así que tampoco creo que puedan
salir contentos del cine después de verla. Y para terminar estamos los frikis
que apreciamos realmente el libro en que se basan estas películas. Está claro
que se trata de una adaptación en la que no se puede transcribir el libro letra
por letra, pero es que el respeto hacia la obra original brilla por su ausencia
en todo momento. Para empezar el tono fabulesco del libro ha sido totalmente
dejado de lado, convertida en una historia oscura y llena de momentos de acción
y romance que no vienen a cuento. Pero es que, no contento con esto, el
director se ha dedicado a recortar trozos del libro, algunos de ellos partes
importantísimas de la narración y sin las que simplemente la historia que se
está contando es otra, para a continuación meter nuevas historias y escenas que
no cuadran en absoluto con lo que Tolkien nos retrataba. ¿Era necesario
convertir a Lago en una ciudad oscura y a Bardo en un partisano? ¿De verdad era
necesario cargarse de forma flagrante las actitudes de los enanos y la
importantísima resolución de la escena de Bilbo y Samug para meter una nueva
escena de saltimbanquis estúpidos que encima termina de tan bochornosa forma,
¿No podían pasar una película sin sacar al mierda orco albino ese que no pinta
nada y su pandilla de ninjas pieles verdes?. Lo dicho, una estupidez de
película que no entiendo como nadie puede disfrutar.
Para terminar un apunte friki: Ese dragón NO ES SMAUG, Smaug tiene una
coraza de oro y joyas en el todo abdomen excepto un punto vulnerable (no voy a
comentar la estupidez de la ballilanza y el legado de Bardo porque me pongo
enfermo)