Título: Argo.
Año: 2012.
Director: Ben Affleck.
Actores principales: Ben Affleck, Bryan Cranston, Alan Arkin.
Formato: Doblada al castellano.
Esta cinta constituye un claro ejemplo de como el tener una buena historia que contar y los medios para ello, no son ni de lejos suficientes para realizar una buena película. Por descontado Affleck contaba con los medios necesarios para llevar a la pantalla esta historia interesante y muy cinematográfica, que cuenta con todos los elementos necesarios para una película de suspense con espías de por medio, además en un ambiente tan sugerente como el oriente medio de los años 70. Pero claro, en primer lugar cargó a la cinta con un lastre demasiado pesado: se colocó a él mismo como actor protagonista. Aunque esto de llamar actor a Ben Affleck es ser demasiado generoso. A mi siempre me ha parecido un absoluto horror en todo lo que hace, y una vez más su nulo repertorio interpretativo hace que su personaje sea uno de los menos creíbles de la historia del cine. Aunque siendo justos, la película ya partía con un lastre aun mayor: Ben Affleck es el director. Crear suspense sin recurrir al efectista más barato y absoluto no es nada fácil, pero Affleck, así como toda la horda de espectadores que vanagloriaron esta película en su momento, parece no haberse dado cuenta de ello. Toda la película tiene momentos insultantes por su efectismo atroz, y escenas cogidas con pinzas y sin ligadura argumental ninguna, pero el último cuarto de hora es una tomadura de pelo cargada de una sucesión resoluciones ridículas de situaciones límite totalmente innecesarias.
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